los flamencos estamos de luto,ha muerto BERNARDA DE UTRERA

Ignacio Díaz Pérez Sevilla Utrera está de luto. Utrera y el flamenco. Utrera por tres días, oficialmente. El flamenco para siempre. Porque la bulería de Bernarda se ha apagado a los tres años de que se apagara su hermana Fernanda. Donde mismo ella. Juntas vivieron, la carrera artística de la una no hubiera existido sin la otra, y juntas murieron. A la misma edad, con la diferencia de tres años que las separaba. La capilla ardiente instalada en el salón de plenos del Ayuntamiento de Utrera es un rosario de gente anónima y conocida que se despide de la artista, que se quedó sin voz. Un quejío. Palos del flamenco. Matilde Coral recuerda que bailó al son de las utreranas en aquella feria sui generis de Nueva York. Y al Lebrijano le falla la voz cuando recuerda a la de Utrera. El alcalde, Francisco Jiménez, ha manifestado su tristeza "por la pérdida de una artista inconmensurable, todo un referente en el mundo del flamenco". Bernarda ha muerto poco a poco. Apagándose como el eco de un cante antiguo. Desde que murió Fernanda, Bernarda no había sido la misma, recuerda su familia, arropada por todo un pueblo. A las 17.00 de la tarde, Bernarda Jiménez Peña, Bernarda de Utrera, dejará el Ayuntamiento para descansar, ya para siempre, en el mausoleo realizado por el artista Pedro Hurtado con que el municipio utrerano recuerda ya en el cementerio utrerano a las dos hermanas, santo y seña de toda una estirpe flamenca y embajadoras del Bajo Guadalquivir allá donde se encontraran, que por algo las niñas incorporaron el gentilicio a su nombre. Premiada y reconocida a lo largo de su carrera artística, entre sus reconocimientos destacan el Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba, el Premio Nacional de Cante de la Cátedra de Flamencología y Estudios Folclóricos de Jerez de la Frontera, el de Mejor Música del año, Radio París, Hija predilecta de Utrera, Medalla de Plata de Andalucía, la XII Bienal de Arte Flamenco de Sevilla, Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, Hija predilecta de la provincia de Sevilla... Y, cómo no, el Potaje Gitano y el Mostachón de Oro de Utrera. Desde el año 2005, Fernanda y Bernarda cuentan con un monumento en su honor en la ciudad de Utrera, por iniciativa de la Peña Flamenca 'Curro de Utrera' y del Ayuntamiento de la ciudad.